Melissa Scott, autora de Trouble and Her Friends

"Los relatos cortos de Lawrence Schimel imprimen cambios contemporáneos a las Marchen y las aventuras románticas que contienen el anteproyecto de nuestro legado literario. Las historias de Schimel son tan ágiles como taimadas, y las mejores de ellas se cimientan en el humor o en el patetismo. Algunas concluyen antes casi de haber empezado; eso está bien, porque en la magia y en el deseo siempre debería haber algo más que lo que capta la vista."

Gregory Maguire, autor de Wicked.

"Como una caja de bombones rellenos de absenta, las historias de esta colección sobresaltan a la vez que divierten. Con su sagaz observación de extraño de las grandes corrientes vueltas del revés, Schimel ofrece a los lectores un espejo lúdico de quiénes somos... y quiénes no queremos ser. Tanto placer culpable como infausta sorpresa acaramelada, decididamente Lawrence Schimel es un escritor (amén de editor) al que conviene estar atento."

Rosemary Edghill, autora de Speak Daggers to Her

"Lawrence Schimel trastoca alegremente los clichés del género fantástico, así como las realidades del mito y la religión, con unas historias que iluminan festivamente los rincones más asombrosos de la vida homosexual, gay y lesbiana."

Mark Kelly, Revista Locus

"En Mi novio es un duende, el estilo de Lawrence Schimel irradia inspiración y gracia, ingenio y espíritu. Para la fantasía, estos relatos tienen una refrescante sensibilidad gay; para la ficción gay son refrescantemente mágicos. Es un libro que alegra el corazón."

Lars Eighner, autor de Travels with Lizbeth y Pawn to Queen Four

"En estas 16 historias, muchas reimpresas en varias antologías, Schimel desplega una prosa limpia, una mirada fresca y una divertida imaginación que hace brillar su estrella, tanto como escritor, como antologista"

Publisher Weekly, EE.UU

"Esta colección de historias cortas del consumado Schimel, posee en igual cantidad encanto y estremecimiento. Estos son cuentos de hadas a dos niveles, la magia se infiltra en lo mundano, y a través de la sensibilidad gay, lo mundano se convierte en mágico. El autor mezcla las tradiciones de las narraciones con una peculiar y divertida perspectiva: historias de vampiros de gays y lesbianas e historias de fantasmas. Ya reconocido como un astuto editor de antologías, Schimel muestra su gran olfato para las historias cortas. Estas fantasías son enteramente divertidas y deberían, al igual que sus arquetipos, permanecer con el lector mucho después de acabar de leer el libro."

The Sidney Star Observer, Australia

"Schimel tiene una maravillosa habilidad para crear imágenes resonantes, cubriendo un complejo territorio emocional en pocas palabras."

Outrage, Australia