El guión está editado en su versión de rodaje, tal y como fue utilizado para rodar los planos, memorizar los diálogos y planificar los tiempos.
Sigue siendo una extrañeza la edición de estas obras pues, al igual que el teatro, se sitúan en un campo ambiguo de la literatura editada. Creemos interesante la adquisición por parte de las bibliotecas, no sólo por su aportación a un campo sin numerosos ejemplos, sino también desde un sentido ilustrativo de las técnicas utilizadas (en él se puede ver perfectamente la estructura de diálogo, acotación, notas y aclaraciones), desde un punto de vista exclusivamente literario (al ser una trama compleja, dinámica, con dosis de humor, novela negra e incluso disertación sobre el mapa económico de la actualidad), por tratarse de una «introducción» inusual a la verdadera producción cinematográfica (y el interés que suscita la comparación con su lectura en la pantalla), y también por ser la ópera prima de un ciudadano salmantino que ha obtenido numerosos premios y reconocimientos nacionales e internacionales.