«El arte de no ser gobernados» en LE MONDE DIPLOMATIQUE
Viernes 20 de Diciembre
BAJO LA BANDERA PIRATA
La viada bajo bandera pirata. Gabriel Kuhn (ED. Katakrak, 2021)
Es posible que los entendidos sobre el tema no descubran aquí datos e informes nuevos, pues hace años que todos bebemos de las mismas fuentes, sin embargo, leer este libro es como asistir a un Congreso sobre piratería. Se pueden conocer las opiniones de los especialistas sobre temas fundamentales como: el trato que se les daba a los nativos americanos y los afrodescendientes en los barcos filibusteros, la limitación que supuso no aceptar a mujeres en sus bandas, la leyenda que provocó su nomadismo, si eran apátridas o luchadores sociales y las razones por las que los piratas autónomos duraron tan poco tiempo. Las citas escogidas, los historiadores en los que se fundamenta y sobre todo, las preguntas y conclusiones a las que llega Gabriel Kuhn, hacen que lo consideremos un autor importante, radical y compañero. Se nota que, por un lado, creció fascinado por los relatos piratescos y, por otro, decidió involucrarse en los movimientos contestatarios. De adulto, decidió estudiar la piratería marina con sumo rigor y trató de comprender porqué en los espacios rebeldes y anticapitalistas actuales, se reivindica la bandera negra con la calavera y las tibias cruzadas.
Es un libro que no solo va destinado a investigadores de la piratería, sino a quienes sientan curiosidad por los abordajes en el Caribe y las costumbres de los viejos lobos de mar, así como a todos los que luchan contra el Estado y la desigualdad social. Cien años antes de la Revolución Francesa los grupos de piratas se regían por cirterios de libertad, igualdad y fraternidad y, mientras la Marina Británica abandonaba a los marineros lisiados para que mendigaran, los filibusteros protegían a sus compañeros heridos con una especie de seguridad social. Tenían conciencia de la dependencia con los demás, justo cuando se estaba imponiendo el sistema mercantil basado en el individualismo despiadado. En ese sentido, se basaban en los valores colectivistas de la clase baja, de marineros y grumetes. Por otro lado, los paralelismos con las comunidades de bandidos analizadas por Hobsbawm son evidentes.
El autor, filósofo de formación, compara la táctica de guerra de guerrillas con los ataques y escondites filibusteros, analiza la vida en constante conflicto como forma de evitar la acumulación y el poder (como Clatres hacía con las tribus jíbaras) y trata de ver características comunes entre los bucaneros de la isla Tortuga con los okupas de los centros sociales, los polizones itinerantes (cultura hoboemia) o la s comunidades indígenas autónomas. Esta obra es al mismo tiempo un monográfico histórico, una etnografía sobre los bucaneros y un ensayo político sobre lo que recscatar y lo que rechazar de los piratas. A fin de cuentas, aunque no merezcan idelización alguna, "deberíamos recordarlos mientras haya gente poderosa y circunstancias opresivas a las que resistir".