«Idazketa labana bat da» IRUTXULOKO HITZAn
Azaroak 22 Ostirala
LAURA PUY MUGUIRO
Pamplona
Deliveroo, Airbnb, Uber, Glovo... son aplicaciones y plataformas online que afirman estar cambiando la forma en que consumimos. ¿Pero qué ocurre con la manera en que trabajamos? Las investigadoras francesas Dominique Méda y Sarah Abdelnour, profesoras de Sociología en la Universidad de París-Dauphine, comparan en Cuando tu jefe es una app, que ha editado Katarak con prólogo del investigador de Trabajo Social en la UPNA Laureano Martínez, esa forma de trabajar con la que se llamó en el siglo XIX trabajo a destajo, sin regulación más allá del pago por pieza.
Los dos conceptos más empleados para denominar el marco general en el que se mueven estas app y plataformas son economía colaborativa y capitalismo e plataformas: ponen en contacto a personas y prestan servicios. El motivo de la doble denominación lo explica Imanol Miramón, editor de Katakrak. «Economía colaborativa es un concepto más amable, que apela a valores positivos, mientras que capitalismo de plataforma muestra dónde se agota la colaboración». ¿Por qué? «Porque aunque la forma en que estas app y plataformas tuvieron de vender que quien tenía un rato libre podía conseguir un dinero al tiempo que ayudaba a alguien [haciéndole de taxistas, llevándole comida...], se ha demostrado que quien trabaja para estas plataformas son asalariados del siglo XXI: lo que hacen no tienen nada que ver ni con el ocio ni con la colaboración, sino con realizar un trabajo». De hecho, añade el editor, existe ya la percepción social de que son trabajos mal pagados -«ves a alguien con una bicicleta con la maleta de Glovo detrás y lo primero que viene a la cabeza es la palabra explotación». y trabajos precarios, «aunque sin saber exactamente si el problema es el salario, las condiciones, los horarios...».
Este es uno de los primeros estudios sobre esta cuestión y que las investigadoras han basado en encuestas a conductores, repartidores e incluso a chefs a domicilio, Añade Miramón que la forma de trabajo que genera esta situación es «extremadamente desregulada. El movimiento que se ha producido con este tipo de empresas no ha sido de alternativas al modelo de mercado en ámbitos concretos, que era lo que prometían, sino que ha extendido el modelo de mercado a sitios donde no había llegado y en una de sus peores formas».